Llegué a la vida
con un sol dentro de un jarrón de agua.
Luz lÃquida y contenida.
Al crecer el agua se fue evaporando.
Sentà el ardor del deseo.
Fue el miedo a la soledad
el pan de cada dÃa.
El amor un astro a años luz
de mi corazón.
El instante del instante
el castillo de naipes
para morar hasta viejo.
Dios el inverso de las cosas.
Se apagó el sol
y quedó un olor
de agua estancada en el aire.
Y el sol, adentro,
palpitó por primera vez.
1 coment�rios:
Impresionante. Si no lo hubieses escrito vos, Camilo, dirÃa que era mÃo.
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