Los gregarios
Andan, ahora más que nunca, preocupados por habitar la ciudad y sus múltiples distracciones para pasar en vela la noche. Se hacen viejos y no quieren asimilar que ya pasaron de moda. Sentados en la sala de la casa de uno de ellos se niegan a renunciar al ron, los cigarrillos, la música y la marihuana....